Vertiginoso año el presente que, en su marejada de malas noticias por violencia, no sólo presenta el secuestro de un connotado político sino que llega a los tres años de la desaparición forzada de dos guerrilleros del Ejército Popular Revolucionario, quienes en actividades de apoyo al movimiento magisterial y social de Oaxaca concentrado en la APPO en 2006, fueron aprehendidos y sumidos en las tinieblas bajo el gobierno de Ulises Ruiz Ortiz. No ha bastado que el EPR ha mantenido un cese al hostigamiento militar para que el gobierno actúe en consecuencia y parece ser seguirá empantanada la búsqueda, aún con la reconstitución de la Comisión de Mediación. La pregunta es necia; pero necesaria: ¿Y DÓNDE ESTÁN LOS DESAPARECIDOS?
No hay comentarios:
Publicar un comentario